Nativa, principalmente, de las zonas tropicales de Sudamérica y Centroamérica (próximas al río Amazonas), pertenece a la familia Piperaceae.
El nombre Peperomia proviene de las palabras griegas “peperi” y “homoios” y hacen referencia a la similitud que tienen las hojas con las semillas de la pimienta.
La Peperomia angulata o Peperomia quadrangularis, es una planta resistente, fácil, colgante, tupida y de hojas carnosas y con finas líneas verde claro que contrastan con el tono verde del fondo.
DIFICULTAD
Superfácil
TOXICIDAD
No tóxica
LUZ
Indirecta muy alta
RIEGO
Moderado
A la Peperomia angulata le gustará estar en un lugar luminoso, con luz indirecta brillante. Hablamos de buscarle un emplazamiento que esté cerca de una ventana muy bien iluminada durante todo el día y con vistas directas al cielo. En verano podrá recibir un par de horas de sol directo de 1a hora de la mañana o última de la tarde, ya que es un sol bajo que no quema, como el de invierno. Durante el resto de estaciones puede gozar de un rato más de sol, ¡sin pasarnos!
Puede llegar a tolerar la indirecta media-baja, aunque habrá que controlar que se adapta bien y seguramente su crecimiento se frenará mucho más, teniendo en cuenta que es un ejemplar lento.
Evitar sol directo fuerte, quemaría sus hojas.
Moderado-débil, ¡controla el pulso! La tierra debe quedar húmeda.
La Peperomia angulata es una planta de raíces finas y hojas gruesas que retienen agua. Por ello, hay que ser súper cuidadoso con el riego: permite que la tierra se seque entre riegos, sobre todo. Puede permanecer algún día seca, pero sin pasarnos, ya que algunas raíces se podrían perder.
Elimina el exceso de agua que quede en el plato de la maceta.
Consejo: comprueba el sustrato en vez de tener un día a la semana marcado para regar, hay varios factores que afectan a la velocidad en la que se seca el sustrato. Puedes hundir un lápiz y retirar a los segundos, si sale seco y sin tierra adherida, toca regar.
Baja.
Gracias a la estructura tipo suculenta, la Peperomia angulata retiene mucha agua en sus hojas. Aún así, y como planta tropical, odia la sequedad ambiental. Por ello te recomendamos que no la coloques cerca de puertas o ventanas que se abran y se cierren constantemente, ni cerca de fuentes de calor o aire acondicionado, resecan el ambiente. Esto la afectará y no crecerá igual de sana.
Si crees que le falta humedad ambiental, ponle un plato en la base de la maceta con bolas de arcilla o greda volcánica y agua -sin que toque la base de la maceta-. Paralelamente puedes juntarla con otras plantas para que cooperen y compartan la humedad que generan.
No tienes que trasplantar a la Peperomia angulata con mucha frecuencia y tampoco a ninguna otra de su familia. No llevará muy bien que la pongas en macetas muy grandes de golpe, te aconsejamos hacerlo poco a poco y de forma progresiva.
Cuando te des cuenta que las raíces ocupan toda la maceta, salen por los agujeros de drenaje o están creciendo en círculos y de forma densa (pueden ahogarse entre ellas), sabremos que ha llegado el momento de trasplantar. Ideal hacer el cambio de maceta a finales de invierno/principios de primavera, cuando la planta empieza a activarse y a meterle caña.
Ponle un tiesto más ancho que profundo, 2 medidas superior al anterior y con agujeros de drenaje. Aconsejamos que sea de terracota, sin esmaltar.
