Nativa de las regiones tropicales de América del Sur, Brasil, pertenece a la familia Marantaceae.
La Calathea makoyana es una de las más preciadas para decorar interiores gracias a su follaje. También se la conoce como Calathea Pavo Real debido a la forma ovalada de sus hojas y el parecido que tiene su estampado con las plumas del animal. Es una planta super decorativa, de aspecto salvaje, además de resistente y fácil de cuidar en interiores. Otro punto a favor es que es purificadora del aire.
Media
No tóxica
Indirecta media
Moderado
Al igual que el resto de Calatheas, la Calathea makoyana disfrutará en rincones con luz indirecta media o alta. Ideal buscarle un sitio cerca de una ventana muy iluminada y con vistas directas al cielo. No la alejes más de 2 metros, te lo agradecerá.
Consejo: hay que tener en cuenta que a parte de necesitar una luz adecuada, sus hojas son finas y no les gustará pasar calor, ya que reseca el ambiente. La sequedad ambiental y calor harán que las hojas se deshidraten, se secarán y la planta podrá sufrir alguna plaga.
Evita el sol directo.
Moderado, ¡sin encharcar el sustrato! Debe quedar húmedo.
La Calathea orbifolia nos pide que seamos cuidadosos con el agua. Permite que el sustrato se seque y en cuanto los bordes de las hojas empiecen a enrollarse hacia la nervadura central, riega permitiendo que toda la tierra quede húmeda. Hay que ser constante.
Elimina el exceso de agua que quede en el plato de la maceta.
Consejo: comprueba el sustrato en vez de tener un día a la semana marcado para regar, hay varios factores que afectan a la velocidad en la que se seca el sustrato. Puedes hundir un lápiz y retirar a los segundos, si sale seco y sin tierra adherida, toca regar. Las Calatheas son caprichosas con el agua, si puedes y tienes tiempo, ideal que sea filtrada o reposada durante 24-48h (no añadas la última parte, ya que es donde podrían reposar algunas sustancias nocivas para estas plantas).
Alta.
Te sonará el consejo de que las Calatheas necesitan mucha humedad en el sustrato. Pero lo que realmente piden, es que nuestros hogares tengan mucha humedad ambiental.
Para que la Calathea makoyana crezca sana, libre de plagas, sin bordes secos u hojas lacias, hay que buscarle un lugar resguardado de corrientes de aire y radiadores e ideal usar un humidificador.
Si quieres, puedes empezar juntándola con otras plantas, ya que entre ellas se crearán un entorno algo más húmedo, pulverizando a menudo sus hojas y añadiendo un plato en la base de la maceta con bolas de arcilla o greda volcánica y agua -sin que toque la base de la maceta-.
Hay que trasplantar a la Calathea makoyana a principios de primavera (época de crecimiento), siempre y cuando las raíces sobresalgan por los agujeros de drenaje porque ya no caben dentro de la maceta y los riegos sean más frecuentes de lo habitual. Si tienes dudas, no tengas miedo y sácala de la maceta para comprobarlo.
Ponle un tiesto 1-2 números superior al anterior y con agujeros de drenaje. Siempre. No le pongas una maceta muy grande de golpe, mejor ir poco a poco ya que podríamos pudrir sus raíces fácilmente.
Consejo: si ves que las hojas más bajas/antiguas amarillean y se marchitan, podría ser que la planta nos esté pidiendo trasplante, aunque siempre habrá que asegurarse de ello.